Una receta para los amantes de la carne, en una versión enmarcada por una crema de judías y un toque final de queso Gorgonzola. Una obra maestra.
Preparación
Escurrir las judìas enlatadas, lavarlas en agua fria, colarlas y licuarlas bien. En una sartén pequeña dorar el lardo con cinco cucharas de aceite, ajo, romero, filtrarlo y añadirlo a la crema de judìa, poner todo en una cacerola y mantener caliente. Limpiar la achicoria, añadir el lardo dorado y ponerlo en un cucurucho de papel para horno mojado y escurrido; cocer en el horno a una temperatura de unos 120° durante por lo menos 25 minutos. Mientras tanto enharinar los filetes y dorarlos con un poco de aceite y una hoja de laurel, en un sartén calentada anteriormente. Dorar durante unos tres minutos en ambos lados, colocar los filetes en una fuente (hornear a 210°), eliminar el aceite de la sartén y añadir el vino, salar, pimentar y reducir. De las rebanadas de queso gorgonzola sacar 6 medallones de queso gorgonzola. Condimentar con el fondo de vino tinto y terminar con la achicoria estofada.