Poner en el bol de la mezcladora planetaria el agua tibia con la levadura y el azúcar.
Derretir bien la levadura con un tenedor. Después, añadir la harina. Amasar brevemente con el gancho amasador; finalmente añadir la sal y el aceite.
Seguir amasando hasta obtener una masa homogénea. Poner a leudar la masa en un bol cubierto con película de cocina o con un trapo.
Poner el bol en el horno apagado, hasta que la masa doble su volumen. A la terminación de la fermentación, extender la pizza con las manos y dejar descansar la masa algunos minutos más.
Condimentar con puré de tomate y un poco de aceite extravirgen de oliva. Cocinar en el horno ventilado a 220 grados durante aproximadamente diez minutos.
Sacar la pizza del horno, colocar el queso Gorgonzola Dulce y el queso mozzarella en cubitos en su superficie.
Terminar de cocinar durante cinco minutos más o hasta que se haya derretido todo el queso.